EL SABER PLANTARNOS FRENTE A NOSOTRA/OS MISMA/OS, Y FRENTE A LA/OS DEMÁS
Con frecuencia, observamos cómo muchas personas, viven obsesionadas con el famoso “qué dirán”, y así, aun sin ser totalmente conscientes de ello, se desviven por vivir “la vida de otra/os”, descuidando la suya propia..
Cuando actuamos sólo de acuerdo a lo que la/os demás esperan de nosotra/os, estamos perdiendo de vista, una realidad insoslayable: que hagamos lo que hagamos, JAMÁS lograríamos complacer a todo el mundo, dado que cada una/o de nosotra/os, es diferente al resto, y, por consiguiente, nunca podríamos agradarle a todo el mundo, ni toda/os ella/os, a nosotra/os.
Entonces, y frente a esta realidad, cabe preguntarse; a quién esperamos complacer, cuando nos autopostergamos, para dar cabida a lo que una tercera persona, espera de nosotra/os?
Qué es lo que se necesita, PARA NO NECESITAR, valga la redundancia, de la aprobación de otra/os, en nuestro diario accionar?
Ante todo, deberíamos tener presente, que, si nos conocemos; amamos, y aceptamos a nosotra/os misma/os, TAL CUAL SOMOS, no tendremos razón alguna, para buscar la aprobación de otra/os, dado que ya en nosotra/os misma/os, LO TENDREMOS TODO; es decir, conociéndonos a nosotra/os misma/os, sabremos qué queremos obtener en nuestras respectivas vidas, sin que sintamos la necesidad de contar con la aprobación de terceros..
De esa forma; si estamos “bien plantados” frente a nosotra/os misma/os; si sabemos QUIÉNES SOMOS, y ADÓNDE QUEREMOS LLEGAR, no habrá “tormenta” que nos derribe, ni nos haga trastabillar; entonces, NO HABRÁ LÍMITES para dejar fluir a nuestro VERDADERO SER, en todo su magnífico esplendor.
MARÍA NELLY SALINA
ENERO 2020